El actor Juan Diego, que cumple casi 50 años en el mundo de la interpretación, recibió el premio «a toda una vida» en la undécima edición del Festival de Cine de Alicante como homenaje a su trayectoria profesional, en la ceremonia del pasado sábado 31 de mayo en el Teatro Arniches.
El intérprete aseguró en declaraciones a la prensa del Festival “que el Festival de Alicante es necesario, más después de la desaparición de la Mostra de Valencia”. También ha agradecido la concesión de este reconocimiento, “ya que la gente del cine tiene que agradecer cualquier cosa que se haga para apoyar al sector”.
El realizador Carlos Saura, que dirigió al intérprete sevillano en las películas «El séptimo día» (2004) y «La noche oscura» (1989), fue el encargado de entregarle el galardón en un emotivo discurso que se retransmitió en directo. Según el director del certamen, Vicente Seva, «es un premio merecidísimo, ya que Juan Diego demuestra en cada personaje su talento, profesionalidad y la experiencia que su dilatada carrera interpretativa le confiere».
En pasadas ediciones del Festival de Cine de Alicante han sido premiados con este distintivo otros actores representativos del panorama nacional como son José Sacristán, Concha Velasco, Antonio Ozores o Asunción Balaguer. Según el director del Festival, Vicente Seva, “es un premio merecidísimo, ya que en cada personaje Juan Diego demuestra su talento, profesionalidad y la experiencia que su dilatada carrera interpretativa le confiere”.
BIO JUAN DIEGO
Juan Diego se dio a conocer en la gran pantalla gracias a su papel en una de las películas más representativas del cine español, Los santos inocentes (1984), de Mario Camus. El actor encarnaba magistralmente al señorito Iván, un despótico latifundista andaluz, que le proporcionó el reconocimiento de la crítica. Sin embargo, ya antes, había dado su salto al cine, en 1966, con un papel secundario en El demonio de los celos.
En 1986 participó en El viaje a ninguna parte, de Fernando Fernán Gómez y Dragón Rapide, en la que Juan Diego encarnó a Francisco Franco. Por su interpretación en ésta última recibió la primera de sus nueve candidaturas a los Premios Goya, que después se llevó por su interpretación en El Rey Pasmado. En 1999 rodó París Tombuctú, en la que dio vida a un anarquista que andaba desnudo por las calles del pueblo, y cuyo papel le ofreció su segundo Goya.
En 2000 participó en You’re the one, de José Luis Garci, y ese mismo año participó con un pequeño papel en Fugitivas, de Miguel Hermoso. Torremolinos 73, de Pablo Berger, llegó en 2003, y el mismo año encarnó a uno de los responsables de la matanza de Puerto Hurraco, con el rodaje de El séptimo día. En 2006, obtuvo su primer Goya como mejor actor principal, por su papel en Vete de mí, de Víctor García León. En el filme interpretaba a Santiago, un actor cincuentón venido a menos que se ve obligado a alojar en su casa a su hijo treintañero, al que interpreta Juan Diego Botto.
En 2008 protagonizó la película Casual Day, y en 2010 intervino en la comedia Que se mueran los feos (Nacho G. Velilla) o la película sobre la vida de Lope de Vega, Lope, de Andrucha Waddington. En 2011 su trabajo más destacado fue su interpretación del general Alfonso Armada en la película 23-F: la película, que le vale una nueva candidatura a los Goya. En 2012 estrena Todo es silencio, de José Luis Cuerda, y rueda Anochece en la India, road movie dirigida por Chema Rodríguez.
La larga trayectoria de Juan Diego ha sido reconocida con el Premio Max de las Artes Escénicas al mejor actor (2000), tres Premios Goya (dos como actor de reparto y uno de protagonista) o el Premio ACE de la crítica cinematográfica de Nueva York al mejor actor de habla hispana (1991), entre otros.